Cuello

Con el paso del tiempo, la concentración de ácido hialurónico en la piel disminuye, dando lugar a la aparición de arrugas y surcos en la piel del cuello, con flaccidez y descolgamiento de éste. Esta pérdida de tersura refleja un cuello fláccido, descolgado, con infinidad de líneas, y con aspecto muy deshidratado.

Par el tratamiento del cuello utilizamos diferentes técnicas y disciplinas, destacando la utilización de ácido hialurónico, cócteles de vitaminas y antioxidantes, estimuladores de colágeno de diferente naturaleza y la aplicación de hilos tensores, para conseguir una mejoría discreta y natural de esta zona.

Las microinyecciones de ácido hialurónico, en diferentes técnicas, como el BLANCHING, permiten la aplicación del ácido en la superficie justo debajo de la piel, para que se integre con los tejidos sin provocar reacciones, mejorando la calidad de la piel.

Generalmente conseguir una mejoría del cuello requiere sesiones que irán estimadas por el doctor en su valoración, y que obtendrán mejores resultados si realizamos una combinación de técnicas entre sí.